En el ajetreado mundo de hoy, ¿quién tiene tiempo para pasar horas limpiando? Imagina esto: es sábado por la mañana, tu familia viene a almorzar, y tu hogar parece un campo de batalla después de una semana agitada. Los juguetes de los niños están por todas partes, hay migas en el sofá, y ni hablemos del polvo acumulado en las cortinas.
Ahí estaba yo, María, una madre trabajadora, enfrentando este escenario de pesadilla. Mi antigua aspiradora apenas podía con las migajas, mucho menos con el pelo de Toby, nuestro querido perro. Estaba a punto de rendirme cuando mi vecina me presentó la solución que cambiaría mi vida: TurboClean™.